El artista madrileño Carlos Orive expondrá a partir del próximo viernes una muestra de sus innovadoras pigmentografías en el centro de arte Pandemolden de Santander. En estas obras el creador fusiona pintura y fotografía, utilizando la técnica de imprimir en el lienzo la imagen fotografiada para a continuación añadir diferentes pigmentos a la tela. El resultado final es original tanto en la forma como en el contenido.

Su obra, que se podría definir como expresionista y simbólica, envuelve al espectador en una atmósfera onírica que puede despertar emociones ambiguas o reflexiones existencialistas en el público, que se siente aludido por el retrato de las preocupaciones universales que refleja el artista en sus lienzos.

La modernista sala Pandemolden, ubicada en Perines, acoge la obra de este fotógrafo, pintor y diseñador gráfico que nació en Madrid hace 38 años. En 1979 comienza su andadura profesional como fotógrafo, explorando diferentes áreas de este campo artístico, como son el retrato, la fotografía publicitaria, la fotografía de moda, de arte o de arquitectura. Los clientes para los que ha realizado su trabajo son también de muy diversa índole: así ha colaborado con instituciones, fundaciones, empresas, particulares e incluso con la Casa Real.

Fotografía artística

Tras todos estos trabajos como fotógrafo comienza, alrededor de 1989, a centrarse en la fotografía artística, tratando de buscar una vía para la revalorización de esta disciplina con su propio estilo y a través de la pigmentografía. Quince años después de este viraje profesional, una parte de la obra del innovador artista se muestra ahora en Pandemolden.

Esta sala esta especializada en la promoción de la vanguardia artística, apostando siempre por artistas originales y conformando uno de los espacios más creativos y multifuncionales de cuantos están funcionando en Cantabria actualmente, ya que reúne en un solo local bar, tienda de modas, sala de exposiciones y centro cultural.